El juego es una actividad necesaria para los seres humanos teniendo suma importancia en la esfera social, puesto que permite ensayar ciertas conductas sociales; a su vez, es una herramienta útil para adquirir y desarrollar capacidades intelectuales, motoras, o afectivas, y todo esto se debe realizar de forma gustosa y sin sentir obligación de ningún tipo; además, como para el resto de actividades, se requiere disponer de tiempo y espacio para poder llevarlo a cabo.
El juego puede resultar especialmente atractivo si logramos dotarlo del enfoque adecuado, la utilización de este recurso posibilita de gran manera la adquisición de algunas de las competencias básicas citadas, tanto en la normativa nacional, como en la autonómica vigente, teniendo especial relación con la consecución de la competencia en el conocimiento e interacción con el mundo físico, competencia social y ciudadana, competencia cultural y artística, competencia para aprender a aprender y competencia de autonomía e iniciativa personal, y a nivel regional, además la competencia emocional.
A través del curso “EL JUEGO COMO RECURSO DIDÁCTICO EN LA EDUCACIÓN” el docente puede adquirir los conocimientos necesarios para utilizar el juego como una herramienta más que ofrecerse a sí mismo y a sus alumnos/as, con el objetivo final de obtener y aplicar en la realidad del aula una metodología alegre y motivadora a la vez que eficaz.
Para ello es imprescindible hacer un repaso sobre aquellos conceptos y clasificaciones que en la actualidad existen y que si son esos y así, es en gran medida gracias al tratamiento que se le ha dado al “juego” a lo largo de su historia, no solo a nivel conceptual sino principalmente por el uso, el valor y los efectos que el juego sirve u ofrece al desarrollo de las personas y por consiguiente al desarrollo de los propios alumnos.
Por eso es fundamental que conozcamos también a través del curso las diferentes etapas evolutivas por las que nuestros alumnos/as atraviesan en relación con el juego, así como nuestro papel de educadores.
Es importante de igual manera conocer y dominar el lugar desde el que parte o en el que está situado el juego en el currículo, que es el punto de partida para la utilización de la aplicación del juego como recurso educativo.
Este conocimiento y manejo del currículo se deberá unir a aquellas orientaciones didácticas ofrecidas en el curso, tanto a nivel metodológico, como estructural, organizativo, así como evaluativo; para poder trabajar con el juego como un recurso verdaderamente didáctico en la educación, sin olvidar que es un elemento especialmente válido para dar respuesta a la diversidad del alumnado y con especial relación con las tecnología de la información y de la comunicación.